Autoridades chilenas desbarataron una banda dedicada al robo, adulteración y venta ilícita de camiones y maquinaria industrial mediante una operación en siete regiones del país.
Según la Fiscalía Occidente, la organización, integrada por tres clanes familiares, también corrompió a funcionarios de tránsito en diversas municipalidades para obtener permisos de circulación.
Cada grupo tenía funciones específicas: unos robaban los vehículos usando grúas y retroexcavadoras; otros los desmantelaban y adulteraban; y un tercer equipo se encargaba de la documentación y venta, a menudo mediante chantaje. Los fondos obtenidos eran ocultados en cuentas bancarias o mediante la compra de automóviles y motocicletas.
Durante el operativo en las regiones Metropolitana de Santiago, Arica, Tarapacá, Valparaíso, Biobío, Los Lagos y La Araucanía, se detuvo a 28 personas y se incautaron más de 100 vehículos y nueve armas de fuego. La evaluación inicial estima que lo recuperado asciende a 10 mil millones de pesos (aproximadamente 10,5 millones de dólares), mientras continúan las investigaciones.
