Cuba es, definitivamente, una Isla incomparable, el lugar ideal para crear reconfortantes recuerdos y vivir experiencias al límite. Varias características de esta nación caribeña se unen para garantizar un viaje perfecto a aquellos que llegan a nuestros espacios, desde el paisaje encantador, el clima tropical y la infraestructura turística, hasta los más disímiles componentes del día a día cubano.
Y muchos son los que confieren en un mismo punto destacado…la gastronomía. Un elemento considerado como inolvidable.
“El mejor sándwich cubano del que he disfrutado… el buffet tiene muy variadas ofertas… buena comida…increíble atención”, son algunas de las opiniones que resaltan en redes de viajes tan conocidas como TripAdvisor, y demuestran que los visitantes de la Isla degustaron la tradicional excelencia gastronómica cubana. Y a día de hoy, son muchos los maestros de cocina de restaurantes de todo el país, que hacen posible que los clientes prueben estos magníficos platos en diversas instalaciones.
Es que la cocina cubana es catalogada hoy por diversos chefs de Cuba y del mundo, como una mezcla de tradición y de nuevas tendencias gastronómicas, de manjares internacionales aderezados con ese toque único, la cubanía. Actualmente, la gastronomía isleña se ha diversificado en cuanto a opciones, frescas y actualizadas, le da prioridad a los productos naturales que aportan valores nutritivos y según varios maestros del país, el buen sabor de la comida no solo recae en tener los mejores ingredientes para trabajar, sino en trabajar con pasión y estar dispuesto siempre a aprender.
Incluso se han incluido poco a poco en las instalaciones gastronómicas cubanas, variadas opciones para celíacos como pastas hechas con féculas de arroz, lo que se refleja en la profusión de productos naturales y de técnicas que aportan mayores valores nutritivos a los platos.
Como podemos ver, la gastronomía cubana tiene un poco de todo, y logra adaptarse a los gustos más exigentes. La comida típica cubana está influenciada por muchas culturas y por ello es tan variada. Incluye desde vestigios africanos hasta toques árabes, chinos, portugueses y de culturas españolas y por ello también se han incluido siempre en todos los platos cubanos, especias como el ajo, el comino, el orégano y el laurel. Ello ayuda a que las comidas presenten un sabor y un olor que hace agua la boca, literalmente.
Los comestibles esenciales de los platos tradicionales cubanos son la carne, las verduras frescas y las frutas. El desayuno usualmente se conforma de leche o jugo natural, distintos tipos de sándwiches o galletas mientras que el almuerzo es probablemente, la comida fundamental de un cubano, con plato fuerte que puede ser carne o huevo, arroz, algún tipo de potaje como frijoles, chícharos o sopa, acompañado todo por vianda frita y ensalada. La comida o cena, es más sencilla y varía según las costumbres de las personas.
Entre los platos habituales de la Isla podemos destacar los sabrosos sándwiches cubanos, que incluyen panes cortados en dos partes con agregos de queso, jamón, atún, huevos, verduras y otros ingredientes a gusto del consumidor. Es un aperitivo excelente, exquisito y energético y se puede encontrar en la mayoría de las cafeterías cubanas.
El arroz con pollo también es un plato típico cubano, para él se utiliza un grano corto y se le da una coloración amarilla. También además del pollo troceado, pueden incluírsele algunas verduras. Es una comida sencilla de hacer, rápida y muy deliciosa.
Por supuesto, los frijoles negros en potaje o en moros y cristianos también constituyen un alimento habitual en Cuba. Se pueden presentar acompañados de arroz o no, según el gusto de los clientes.
Otros potajes muy sabrosos como el ajiaco o la caldosa son también integrantes habituales de las celebraciones en esta Isla, con viandas, carne de cerdo, y las más variadas especias y sazones.
CÓMO HACER ROPA VIEJA CUBANA
Ingredientes
Para la carne
1 libra de carne de res,1 cubito de caldo de res
2 hojas de laurel y Pimienta negra y sal al gusto
Para la salsa
1 cebolla grande, 1 pimiento, 2 o 3 dientes de ajo
½ cucharadita de comino en polvo, 1 cucharadita de orégano (puede ser fresco o en polvo)
½ taza de vino tinto, 1/8 de taza de vino seco
½ taza de puré de tomate y Aceite
Modo de elaboración
1. Ablandar la carne en una olla, lo ideal sería que fuese de presión, unos 30 minutos hasta que esté bien blandita para que sea más fácil desmenuzarla, para ello al agua agrégale sal y debe cubrir hasta 3 dedos por encima de la altura de la carne.
2. Una vez que hayan pasado los 30 minutos comprobamos que la pieza de carne esta lista introduciéndole un tenedor, si al pincharla el tenedor se hunde con facilidad es que esta en el punto que queremos.
3. Escurrimos y colocamos la carne de res en un recipiente hasta que se enfrié. Puedes conservar el caldo para usarlo en otros platillos.
4. Coger 2 tenedores y deshebrarla bien, reservamos.
5. Para la salsa, picamos en cuadraditos pequeños la cebolla y el pimiento, trituramos bien los dientes de ajo y sofreímos solo 30 segundos en la sartén caliente con solo una cucharadita de aceite.
6. Agregamos el resto de los ingredientes al sofrito, el comino, el orégano, vino tinto, vino seco y puré de tomate, revolvemos hasta que esté todo bien integrado durante ½ minuto.
7. Finalmente añadimos la carne desmenuzada y cubrimos bien con toda la salsa, cocinamos a fuego medio unos segundos y rectificamos si esta en el punto de sal que te gusta.
8. Y listo, ya tienes la ropa vieja tan deliciosa para disfrutar cuando desees y mimar tu paladar.
Claudia Rodríguez
Periodista, especialista en Social Media Marketing