Los dos tallos de cebollín

Entonces, cuando mi hermano llegó hasta donde mi abuela a darle quejas porque no le había dado refresco, ella me miró desde donde estaba sentada y con un gesto de sus ojos...

De los pies a la cabeza

El narcotráfico se tragó a mi ciudad. Casi todos éramos parte del crimen organizado y el gobierno era la cabeza del corporativo. Personas como yo o como mis parientes, éramos los pies...

Del pasado incierto

A Eréndira Corona «…ya en las memorias un pasado ficticio ocupa el sitio de otro, del que nada sabemos con certidumbre —ni siquiera que es falso».

Dualidad del verbo

«Ya no CREO», decía la nota junto al cuerpo yerto del artista. Sus colegas, horrorizados, lloraron la crueldad de esas musas en fuga. El cura se...

La pluma y el pergamino

La tormenta era recia y el mar perturbado rompía la popa en medio de la nada. El frágil galeón sentía crujir su piel de teca, cediendo con las embestidas de la iracunda...

Bella histeria

Se levanta el telón, ingresan los músicos y se acomodan. En un camarín ha quedado el delicado bouquet de camelias junto a una tarjeta. El hombre...

Pecado de omisión

Un fatídico día del año 1633 llegó a un pequeño pueblo cercano a la ciudad de Londres un vendedor ambulante. Acomodó su carromato junto a la plaza principal y comenzó a exponer...

La espera

Parece un mal sueño. Lo frío y rígido de su cuerpo me enloquecen ¡No lo soporto! El vestido que la cubre, con pocos vestigios de su blanco original, luce...

Es culpa de Schrödinger

Es culpa de Schrödinger. Sí, de él. Que insistió en imaginar a un gato dentro. Pienso aquello, mientras balanceo indeciso el lápiz sobre el papel y observo al minino rodear el cubo...

Iluminado

― ¿Cuánto debería durar una vida? ―preguntó mi amiga. No respondí, ella agregó sonriendo ― Cuando un joven muere, lo lamentamos más, juzgamos que no era...