Cubanos y canadienses estrecharon relaciones mediante las artes manuales con la participación conjunta en el III Festival Nacional El Artesano Artista, que se celebró la semana pasada en Matanzas, occidental provincia del país caribeño.
Representantes del territorio sede, de la capital de Cuba y de Quebec fueron los protagonistas de un encuentro que tuvo su primera edición en 2020 y se ratificó ahora como momento propicio para el intercambio de experiencias y de técnicas valiosas en la creación.
A criterio de sus organizadores, esta cita favorece el diálogo entre creadores de la mayor de las Antillas y pone énfasis en la formación y el desempeño de las nuevas generaciones de artesanos y artistas.
Con obras destinadas a la ciudad de Matanzas y dedicada al artista Rolando Estévez y a Teatro de las Estaciones, este Festival tuvo como elemento llamativo la exposición Con el corazón en la Mano, la cual marcó la jornada inaugural.
Tal muestra, auspiciada por el proyecto internacional Mano a Mano Artesanos sin Fronteras, reunió a diversas creaciones de estudiantes canadienses.
Según el presidente de dicha iniciativa en Quebec, Pierre Hivon, la experiencia en el evento fue muy interesante pues permitió el aprendizaje de diferentes maneras a la hora de plasmar ideas.
La posibilidad de intercambiar criterios para los alumnos de ambos países resultó muy positiva tanto en lo referente a la exposición como al certamen en general, opinó la jefa del Centro de Documentación de la Asociación Cubana de Artesanos y Artistas, Annia Cortezaga, citada por la agencia de noticias Prensa Latina.
En declaraciones a ese medio de comunicación, la canadiense Catherine Coutu manifestó que la posibilidad de venir a Cuba y compartir conocimientos y perspectivas del arte con jóvenes creadores fue espectacular, enriquecedora y gratificante.
Comentó que consiguió su inspiración mediante el vínculo con el público mientras realizaba el trabajo con pieles junto al arte circense, una fusión de mucho agrado en los niños durante la presentación correspondiente.
Por primera vez en su labor profesional Coutu aplicó la técnica propia en piel en varios proyectos de Matanzas que fomentan el uso de las manualidades y participó en un pasacalle incluido también en el programa del Festival.
Otros creadores coincidieron en la importancia de este encuentro, que permite, recalcaron, ampliar sus capacidades artísticas y acercarse a métodos diversos, pero a la vez capaces de lograr armonía entre ellos.