El turismo por sí solo no desarrolla ningún país: La realidad de Dominicana

Seis de cada 10 personas viven en informalidad en República Dominicana, problemática que afecta el correcto desempeño de la economía y, por ende, de la región, destacó Andrés Cadenas, socio senior de la firma McKinsey & Company en Colombia, durante su intervención en el primer foro ejecutivo sobre transformación global a partir de nuevas tendencias comerciales, tecnológicas y demográficas, celebrado en el país.

Andrés Cadenas, socio senior de la firma
McKinsey & Company en Colombia.

La informalidad laboral en la República Dominicana se mantiene como un dolor de cabeza para el Gobierno, el 58 por ciento de los dominicanos laboran en la informalidad, con una brecha amplia entre grupos de ingresos y las regiones de la nación.

“El modelo de urbanización generó grandes ciudades en Santiago y Santo Domingo, en donde hay una muy buena parte de la población que no tiene acceso y no pertenece a la economía formal, ni a empresas formales, ni como individuos a la Seguridad Social”, planteó Cadenas. Y explicó sus consideraciones tras la presentación del estudio “El mundo ante una nueva era”, desarrollado por McKinsey & Company y presentado en uno de los salones del evento.

Detalló que la solución al nuevo orden de desarrollo social implica un proceso lento de focalización de inversiones públicas y privadas, y la atracción de capital extranjero que aporte valor en las demarcaciones.

Durante su intervención en el evento, en el que participó un selecto grupo de ejecutivos de grandes empresas del país, reconoció que República Dominicana ha hecho iniciativas interesantes con el turismo y las zonas francas, pero hace falta mucho en otros sectores productivos.

Como ejemplo citó educación, renglón en el que el gobierno invierte el 4 % del producto interno bruto (PIB), pero lo ha orientado a la construcción de infraestructuras y el manejo del magisterio, dejando rezagada la mejora en la calidad educativa.

“Necesitamos salir de los últimos puestos del Programa Internacional para la Evaluación de Estudiantes (PISA) para generar visión a largo plazo de una población más educada”, asentó.

Al referirse sobre las condiciones para atraer inversionistas, dijo que el costo país que registra República Dominicana les permite a las empresas: Invertir; aprovechar la mano de obra local, y exportar.

Hay que fortalecer la forma de transmitir estabilidad jurídica, local y política, que genere mayor sentimiento de confianza en otras áreas potenciales para invertir.

En el país hay más de un 70 % de las micro, pequeñas y medianas empresas (Mipymes) que siguen sin formalizarse, a pesar de que el Gobierno ha creado mecanismos e incentivos para que los empresarios y emprendedores comiencen a regularizar sus negocios.

La información la ofreció en su momento, el viceministro de Fomento a las Mipymes, Jorge Morales, quien aseguró que en los últimos 18 meses en el país se han formalizado más de 30,000 mipymes, a través del programa Formalízate del Ministerio de Industria Comercio y Mipymes (MICM).

Aunque considero como un logro la regularización de las mipymes en los últimos meses, reconoció que el país tiene un reto que debe afrontar. En total se han regularizado alrededor de 500,000 empresas mipymes en el país, agregó.

José Luis Perelló Cabrera
+ posts

Investigador. Cátedra de Estudios del Caribe «Norman Girvan»

Universidad de La Habana