Esta semana se está llevando a cabo el Festival de Cine de Venecia y dentro de su programación se incluyó la película mexicana “50 (o dos ballenas se encuentran en la playa)”, que trata sobre dos jóvenes que participan en el juego Blue Whale Game, que consta de varios retos, donde el número 50 y último es quitarse la vida.
Tristemente, la historia está basada en hechos que sucedieron en México en 2018. ¿Por qué algunos jóvenes participan en estos juegos? Será que la inmediatez de la digitalización le quita el sentido a sus vidas? Correo Canadiense tuvo la oportunidad de conversar con el director Jorge Cuchí, quien ha trabajado en cine y tv, y que presentó en competencia su ópera prima.

¿Qué te motivó a hacer esta película? Entiendo que te basaste en un hecho real, pero por qué llevar esta historia a la pantalla?
Me llamó mucho la atención este juego que te obliga a vivir intensamente 50 días para después pedirte que acabes con tu vida. Uno de los retos le pide al jugador tener una cita con otra “ballena azul” y a partir de ahí construí mi historia. Dos jóvenes que son representación de la tristeza. Ella, con una carga de su pasado que explica su tristeza y él, un joven con una melancolía inexplicable, todo un enigma. La tristeza es un estado mental extremadamente peligroso y que se vuelve fatalmente peligroso cuando de agrega la intensidad con la que los jóvenes experimentan todo lo que sienten. La película me dio la oportunidad de reflexionar sobre muchos temas: la relación de los jóvenes en este mundo digital, sobre el valor de la vida, la muerte, el poder del amor y el poder de la tristeza.
¿Qué piensas de las juventudes de hoy, con esta era digital? Será que la digitalización está volviendo a los jóvenes menos sensibles?
La digitalización está creando juventudes más conectadas y eso es bueno, nos vuelve más expuestos. Más allá de culpar a un juego por el suicidio de adolescentes, mi intención fue redirigir esta culpa a otras fuentes. Quien entra a estos juegos en alguien que ya está pensando en suicidarse. La tristeza precede al juego y sus causas no tienen que ver con él. Mi intención es redirigir la atención del juego a nuestra casa, a quienes están cerca de nuestros jóvenes, padres desinteresados, abusadores, autoridades escolares poco vigilantes.
¿De qué manera te toca este tema de “jugar a morirse” entre los jóvenes?
Tengo un hijo de 24 años y yo también fui adolescente, por ello sé que los jóvenes sienten mucho. Estos retos de internet son una amenaza a la que están expuestos nuestros hijos constantemente y la mejor manera de protegerlos es estando vigilantes no sólo en el mundo digital sino en el real, donde realmente están los peligros y las tristezas
¿En dónde más se ha visto y se verá tu película?
La película se vio en el Festival de Cine en Construcción de Toulouse. En el Festival de Cine de Venecia se presenta en la Semana de la Crítica Internacional y después se verá en otros festivales internacionales.
Fotos: cortesía de Alibi Communications