México con M de Mujer

 Justamente 200 años han transcurrido desde que en 1824 Guadalupe Victoria se convirtiera en el primer presidente constitucional de México, un cargo ocupado a partir de ese momento de manera sucesiva por 65 figuras de diferentes posturas y posicionamientos políticos, pero que siempre tuvieron un elemento en común: el hecho de ser hombres.

   Tan larga lista de nombres masculinos en el Ejecutivo se interrumpió este 1 de octubre, cuando, por primera vez en la historia nacional, una mujer tomó posesión como presidenta del país, Claudia Sheinbaum, quien en junio pasado se impuso en las urnas como abanderada de una coalición de izquierda.

“El 2 de junio de este año el pueblo de México de forma democrática y pacífica dijo fuerte y claro es tiempo de transformación y es tiempo de mujeres”, expresó la nueva dignataria en un discurso ofrecido tras recibir la banda presidencial en el Congreso de la Unión, como parte de una ceremonia en la que estuvieron presentes varios jefes de Estado y Gobierno de América Latina y el Caribe.

   Durante esa alocución, Sheinbaum, de 62 años de edad, tuvo palabras de elogio para el mandatario saliente, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), a quien consideró “el dirigente político y luchador social más importante de la historia moderna” y “el presidente más querido, solo comparable con Lázaro Cárdenas”.  

   La labor desarrollada por AMLO durante sus seis años en el poder es la base sobre la cual Sheinbaum pretende implementar el programa propio de Gobierno en el nuevo sexenio, en lo que ella ha llamado reiteradamente el segundo piso de la cuarta transformación de la vida pública de México.

   Tras el acto de rigor en la sede del Legislativo, la presidenta pronunció un discuro frente a una multitud de seguidores en el Zócalo, donde aseguró que, como dicta la Constitución, en 2027 se someterá a revocación de mandato, un instrumento utilizado para determinar la salida anticipada de un gobernante en caso de que pierda la confianza de la ciudadanía.

   Agregó que mantendrá las conferencias matutinas instauradas por su predecesor, defendió la reforma judicial impulsada por el Ejecutivo previo, y adelantó que buscará la reforma constitucional en materia electoral.

   DESAFÍOS PARA UN SEXENIO

   Sheinbaum comienza su mandato con buen pie, pues una encuesta del diario El Financiero divulgada esta semana arrojó que su trabajo como mandataria electa contó con 67 por ciento de aprobación popular.

   Al mismo tiempo las expectativas puestas en su gestión son positivas, pues más del 60 por ciento de los entrevistados estimó que la economía mejorará y la pobreza se reducirá, y el 57 por ciento espera una recuperción en la seguridad pública.

   De acuerdo con el sondeo, el combate a la inseguridad es el asunto más importante que debe atender el Ejecutivo, seguido por otras prioridades como crear empleos y oportunidades económicas, combatir la corrupción y disminuir la pobreza.

   Expertos consultados por el diario La Jornada consideraron que estabilizar las tasas de crecimiento y ejecutar un plan de consolidación fiscal para revertir el déficit son los principales retos económicos que enfrenta Sheinbaum, cuando la mandataria se propone consolidar grandes obras iniciadas por AMLO como el Tren Maya, el Corredor Interoceánico, el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles y la Refinería de Dos Bocas.

   Según el portal británico BBC, los cuatro grandes desafíos de la dignataria son la violencia y el crimen organizado; los derechos de las mujeres; la relación con Estados Unidos, en particular lo vinculado con la migración y la frontera común; y su determinación de parecerse o diferenciarse de la presidencia de AMLO.

   Ese es el camino que se abre ante la nueva presidenta, una mexicana que acaba de llegar a donde ninguna otra compatriota lo hizo antes.   

José Oscar Fuentes
+ posts