El verano siempre trae consigo un considerable aumento de las temperaturas que en los últimos años han llegado a registrar niveles históricos. Julio está siendo nuevamente un mes bastante caliente en la ciudad de Toronto y por ello las autoridades han levantado varias alertas para que los residentes tengan cuidado de los efectos de la sobrexposición a las altas temperaturas.
Environment Canada recomienda a los ciudadanos estar atentos a los síntomas de la enfermedad por calor, incluidos mareos, desmayos, náuseas, vómitos, respiración y latidos cardíacos rápidos, sed extrema y disminución de la orina con un color inusualmente oscuro.
La agencia añadió que las personas deben “buscar un lugar fresco”, como un área sombreada, una piscina, una ducha, un baño, o un edificio con aire acondicionado.
Además no deben olvidar a mascotas, niños u otros adultos dentro de un vehículo estacionado.
Según la organización Think Hazard, en Toronto el peligro de calor extremo se clasifica como medio de acuerdo con la información disponible en esta herramienta. Esto significa que hay una probabilidad superior al 25 % de que se produzca una exposición prolongada al calor extremo, causando estrés térmico, al menos una vez en los próximos cinco años.
Según un informe de evaluación del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC, 2013), las continuas emisiones de gases de efecto invernadero provocarán un calentamiento adicional, y con seguridad se registrarán niveles extremos de temperaturas cálidas de manera más frecuente en la mayoría de las zonas del planeta en los próximos 50 años.
El calentamiento no será uniforme en todas las regiones. En Toronto el aumento de la temperatura será muy superior al promedio mundial en los próximos 50 años. Estos efectos ya se sienten en todo el país, pues la ola de calor extremo que sufrió el oeste de Canadá a finales de junio y principios de julio de 2021 causó la muerte de 619 personas, en su mayoría individuos de edad avanzada y con problemas de salud.
